miércoles, 28 de abril de 2010

Fecha 16 vs. el Pincha

Las explicaciones místicas no le caben al fútbol pero se usan siempre. ¡Qué mala suerte! De todas las pobrezas de ser Millonario, una de las que más detesto es ésta: tener que hecharle la culpa a una jugada fortuita que te desequilibre un partido. Porque después del desnivel, River es un tobogán a la desesperación.
Veinte minutos buenos contra el mejor equipo de Argentina. Eso es lo que hoy todo riverplatense tiene que valorar. ¡Veinte minutos! Sí, es lo que hay. Pero en esos veinte minutos, por más que los fucking periodistas digan que "no daba la sensación de que River podía lastimar a Estudiantes" (¿Sensación? ¡Vamos! ¡La rodilla de Desábato no tuvo ninguna sensación! ¡El fútbol no es sensación!), lo que queda es la ilusión de que la próxima fecha sean veintiuno y la siguiente veintidos y así.
En esos veinte minutos: corrieron, presionaron, defendieron con seguridad, jugaron a uno o dos toques, desviaron un centro, la fueron a buscar adentro.
"Quiroga nunca justificó qué hizo para estar en River" dijo un pelotudo de Fox. ¡Andá a jugar al fútbol vos, gordo salame! ¡Desde atrás del mostrador ese es fácil sacarle el cuero al que la pifia! Además que si vamos al caso muchos de los que están en River hoy no justificaron nada para estar ahí.
Después del gol en contra, parecía que los muchachos nunca se hubieran visto en su vida. Villagra hizo un cambio de frente tan feo que Ferrari tuvo que correr veinticinco metros para atrás y no llegó. ¡Quiéranse, muchachos! ¡Si van perdiendo y no se quieren no van a dar vuelta un partido nunca en su vida!
Y aprendan del Pelado: Sosa lo quiso pasar bocha de veces y nunca pudo, y después vino ese pibuto Nuñez y el Pela se lo comió crudo. El mejor de la cancha lejos. Y después lo andan pidiendo a Marito Bolatti...

Lo positivo del partido:
-veinte minutos de buen fútbol
-no perdimos por goleada
Lo negativo:
-una derrota más
-ganó Boquita
-salió Ferrero y entró "Motoneta" Cabral
-entró Cabral
-entró Cabral (como se puede ver es MUY negativo que haya entrado Cabral)

jueves, 22 de abril de 2010

El paredón (1)

M.G.L.: Hola, sí, ¿el ^Pitu Abelairas?
P.A.: Sí, ¿quién es?
M.G.L.: Te hablamos del Movimiento Gallináceo de Liberación. Se acabó la tolerancia. En este mismo momento está yendo un chancho bomba al entrenamiento para inmolarse adelante tuyo en honor a todos los chacinados del mundo. Que te garúe finito.
--BOOOOMMM--

Mirá que hay jugadores pecho frío, pero ninguno con tan poca temperatura como la tuya, Pitu. Y lo peor es que si jugás en otro equipo la rompés, así que la mejor solución es el pelotón de fusilamiento.

lunes, 19 de abril de 2010

Fecha 15 vs. el Tomba

Algún día tenía que pasar. No sólo River hizo goles sino que ganó un partido (dos cosas que los riverplatenses no festejábamos desde hacía rato). Y le ganamos a Godoy Cruz, que pelea en los primeros puestos. Conclusiones posibles:
-O es como dice mi hermano que los de Godoy Cruz estaban muy parados
-O hay que matar a los nuestros si es que podían correr, meter y jugar así antes y no lo hicieron.
No estoy de acuerdo, de todos modos, con los que dicen que River no venía jugando bien: no la venía metiendo, eso sí; pero yo ya me había quedado muy conforme con el partido que habían hecho contra Newell's (pese a la derrota) y por momentos River jugó buen fútbol contra Atlético Tucumán. Claro: si no le podés ganar al Decano estás en serios problemas.
Escena en el primer tiempo: yo no estaba viendo el partido porque tenía que estudiar y mis compañeros de estudio se fueron más o menos a los 20' del PT. Entro a la cocina y mi viejo está mirando el partido. "Estás demasiado sonriente, papá" dije. "Es que está jugando bien" me contestó. "Bueno, no sonrías tanto porque después perdemos". Veinte minutos después el Tomba se ponía en ventaja con la única llegada clara que tuvo. Terror, angustia: River de esto no se levanta, pensé. En el segundo tiempo, gracias a dios, salió Barrado (futuro objetivo del paredón de fusilamiento) y tanto Affranchino como el Tucu Pereyra lastimaron mucho por los costados (el gol del Burrito llegó por un desborde de Pereyra).
Balance tentativo:
-lo positivo: volvió el Enano, River llegó a hacer doce toques seguidos, River metió dos goles, posiblemente Barrado no vuelva a jugar. (nota mental: Barrado y Abelairas tienen que irse a jugar a Groenlandia así hacen juego con la temperatura del ambiente).
-lo negativo: se desgarró el Muñeco, se lesionó Vega, la próxima fecha es contra Estudiantes (hay que planear algún atentado en el country a ver si van con algo de miedo o algún jugador menos) (hay que ver si la plata del Pelado puede competir con la plata de Verón).
No sé qué puede pasar, pero lamentablemente la esperanza es lo último que se pierde (y el hincha de River viene viviendo de esperanzas desde hace rato).

jueves, 15 de abril de 2010

Y llegó Cappa

La vida del hincha de River en los últimos años ha sido mirar siempre para adelante, a un futuro que es más una zona de promesas que un espacio de certezas y que, al volverse presente, cumple poco y decepciona mucho.
Se fué el Negro Astrada, que había llegado con la promesa (y algunos chispazos al final del campeonato pasado) de buen fútbol, orden y progreso. La propuesta se diluyó. River, sus futbolistas (productos mediocres de una dirigencia nefasta, corrupta y malintencionada que dejó al club lisa y llanamente en pelotas), fagocitan toda buena intención y la corrompen hasta llevarla a la nada. Lo mismo había pasado con el (olvidable) paso de Pipo Gorosito: puras intenciones, malos resultados, crisis y fracaso.
Llegó Cappa. Y llegó con la promesa de "buen fútbol", de "fútbol bien jugado" (no me agrada la evaluación ética como sinónimo de una evaluación estética, pero así lo dicen todos y no me voy a separar de esa forma de hablar porque no encuentro palabras mejores). Llegó Cappa a enseñarles a los jugadores que tiene River a jugar al fútbol con la pelota, a soltarse en la cancha, y a algunos hasta a enseñarles que para correr primero el pié derecho y después el izquierdo (Cabral va a tener que ser el alumno más aplicado ahí).
Vamos a ver si la mediocridad no se come las buenas intenciones. Vamos a ver si a mitad de año llegan "refuerzos de jerarquía". Vamos a ver si, finalmente, no resulta que Cappa también se tiene que ir fracasando.
La venida de Cappa me satisface ideológicamente. Pero el fútbol es mucho más que estilos o ideología.